El Principe de Gales fue investido como Gran Maestre de la Orden del Baño, durante una ceremonia solemne en la Abadía de Westminster.

En el evento, el rey Carlos Ill del Reino Unido, vestido con la capa ceremonial, acompañó al príncipe William en esa noche espacial él para el que sigue los pasos que ya recorrió su padre antes de llegar a ser el rey.
Durante tres siglos, la orden ha reconocido logros militares y civiles excepcionales en el Reino Unido y la Commonwealth.


Fue establecida por Jorge I en 1725, aunque sus orígenes se remontan a la época medieval, cuando parte de la ceremonia de investidura incluía un baño ritual como simbolo de purificación espiritual.

