Esta semana, la familia real británica ha estado en el ojo del huracán. El príncipe Enrique y su esposa, la duquesa de Sussex, Meghan Markle, ofrecieron una entrevista que muchos han catalogado de ‘’explosiva’’ a la famosa presentadora estadounidense Oprah Winfrey.
Durante su participación en el famoso programa de televisión, la duquesa de Sussex y el príncipe hicieron pronunciamientos que develan un lado no conocido del interior de la familia británica.
En la íntima conversación de dos horas, Meghan Markle dijo que, cuando estaba embarazada de Archie, hubo conversaciones en el Palacio de Buckingham acerca del estatus de su futuro hijo, incluyendo el título que debería recibir.
«Decían que no querían que fuera príncipe o princesa», contó, aclarando que en ese momento se desconocía el género del bebé. «Esto hubiese diferido del protocolo», afirmó.
La duquesa habló en detalles sobre el racismo que dice haber sufrido en el seno de la familia británica.
El príncipe Enrique aseguró que uno de los episodios más “reveladores y tristes” fue cuando más de 70 diputados británicos denunciaron el “trasfondo colonial” de algunos artículos publicados sobre su esposa, pero “nadie de la familia dijo nada en esos tres años”. “Eso duele”, añadió.
El príncipe responsabilizó “en gran parte al racismo” de la decisión de la pareja de desvincularse de las labores reales y abandonar el Reino Unido.
Al hablar de la situación actual con respecto a los integrantes de la Familia Real, Harry reconoce que su relación con la Reina Isabel II está mejor que nunca: “Ella es mi coronel en jefe, ¿verdad? Siempre lo será”, asegura. Pero, esto no ocurre con su padre, el príncipe Carlos y quien es el heredero del trono. El esposo de Meghan Markle dice en un tono de tristeza que, “hay mucho que trabajar allí”.
“Me siento realmente decepcionado porque él ha pasado por algo similar, el sabe cómo se siente el dolor… y Archie es su nieto’’, , asegura en entrevista. Pero Harry asegura que retomar la relación con su padre está dentro de sus prioridades.
Asimismo, dijo que él y su esposa Meghan Markle hicieron “todo lo posible” por permanecer en la familia real británica. “Me entristece que haya pasado lo que pasó, pero me siento cómodo sabiendo que hicimos todo lo que pudimos para que funcionara”, señaló.